Imagen 1. Yegua amantando. Fuente: Leonardo Rivero
Por: Leonardo Rivero
Tec. Med. Cs. Agricolas
Estudiante FCV UNEFM
Contactos:
0424-650.16.63
BB pin: 21560880
Fuente:
La
isoeritrolisis neonatal (IN), eritroblastosis neonatal o anemia hemolítica del
recién nacido, es una enfermedad inmunitaria en la cual el sistema inmune del
potro debido a un fenómeno de isoinmunización de la yegua reconoce sus
eritrocitos (glóbulos rojos) como cuerpos extraños destruyéndolos. Esta patología
fue descrita por primera vez en 1941 por Levine y colaboradores; para el año
1948 fue descrita en los equinos por Bruner y colaboradores. La isoinmunización
de la madre puede ser ocasionada bien sea de forma natural, de manera inducida
por transfusiones sanguíneas incompatibles creando hipersensibilidad a
determinado grupo sanguíneo y por la utilización de vacunas compuestas de
eritrocitos (Rinoneumonitis Equina); también puede ser causada por
procedimientos quirúrgicos (cesáreas), manipulación vaginal inadecuada frente a
una distocia y separación manual de la placenta.
Al
momento del parto la cría incondicionalmente debe consumir el calostro antes de
las 48 horas, el cual le proporciona las defensas necesarias para combatir las
enfermedades a las que está expuesto al nacer mediante los anticuerpos
calostrales, los cuales llevan la memoria inmunológica de la madre, esto quiere
decir que el potro estará protegido en contra de aquellas enfermedades las
cuales la madre ha superado en el transcurso de su vida hasta el parto. De ser
ocasionada la IN de manera natural se debe tomar en cuenta que fue producida
debido a que el potro heredó el grupo sanguíneo del padre y al momento de
suceder algún escape de eritrocitos bien sea por las causas antes descritas,
debido a la relación materno-fetal la madre automáticamente producirá
anticuerpos en contra de esos eritrocitos lo cual se manifiesta en un aumento
de isoanticuerpos en el plasma sanguíneo de la madre en los últimos meses de
gestación; de no tomarse medidas serán transferidos al potro por vía calostral.
En el
caso de la presencia de IN por transfusiones sanguíneas ocurre que el potro
hereda el grupo sanguíneo del donante maternal, al igual que la ocasionada por
vacunas.
El
eritrocito del equino puede presentar hasta 30 determinantes antigénicos, los
cuales se dividen en 7 sistemas genéticos de grupos sanguíneos, los cuales
tenemos los sistemas A, C, D, K, P, Q y U. Los sistemas pueden presentar
diferentes combinaciones lo cual ocasiona que los equinos puedan tener alrededor
de 400.000 tipos sanguíneos; el determinante antigénico A del sistema A y el Q
del sistema Q tienen el 86 % de incidencia en casos de IN en USA, lo cual debe
de considerarse al momento de realizar transfusiones sanguíneas.
Imagen
2. Esquema del consumo de calostro Fuente: Inmunologia Veterinaria Tizard 2009.
El
potro nace absolutamente normal a excepción del momento en el que consume el
calostro desencadenándose los signos clínicos. Los anticuerpos son absorbidos a
nivel intestinal específicamente por la mucosa del yeyuno e íleon pasando así a
la circulación sanguínea destruyendo los eritrocitos; la severidad de la
enfermedad va a depender de varios factores como el tipo de anticuerpo, volumen
de calostro ingerido por el potro, naturaleza de la reacción
antígeno-anticuerpo entre otros. Los
primeros síntomas los vamos a encontrar a las 12-36 horas post nacimiento con
debilidad, taquicardia y taquipnea que responden a cualquier actividad física
por lo que el animal permanece postrado debido a la fatiga; los signos de
ictericia se van a encontrar posterior a las 24-48 horas lo cuales se hacen
significativamente más intensos a el 4-6 día de edad, el potro tiene una
temperatura corporal normal y en ocasiones se presenta hipotermia debido a la
debilidad y decúbito prologado. En casos muy agudos el potro presenta hemoglobinuria
posterior a las 48 horas de vida, la duración de la enfermedad es variable
encontrándose en algunos casos la muerte del potro a las 12-36 horas de
nacimiento ocasionada por una anemia aguda, pero el mayor porcentaje de mortalidad se
encuentra entre el 3-4 día post nacimiento.
Imagen 3. Ictericia severa de la membrana mucosa de
potro con IN. Fuente: Color atlas of diseases and disorders of the foal.
Posterior a la
muerte del animal, al realizarse la necropsia dentro de las características
macroscópicas se encuentra anemia e ictericia, los potros que mueren entre el
nacimiento y las 12 horas se encuentran dentro de la forma pre aguda de la
enfermedad encontrándose solamente anemia, la ictericia es evidenciada a partir
de las 48 horas post nacimiento mostrando serio grado de severidad al aumentar
la edad. En la forma aguda se presenta esplenomegalia y luego de 4 a 5 días el
bazo recobra su tamaño normal o un poco reducido con poca cantidad de sangre;
se señala también hepatomegalia con un
hígado de color oscuro teñido con pigmentos biliares. En los casos que se
presenta la hemoglobinuria vamos a observar al riñón aumentado de tamaño con la
presencia de pigmentos variando la orina de un color amarillento a vino tinto;
en los pulmones se observan extensas áreas de edema y hemorragia en la
serosa. Microscópicamente se observa
eritrofagocitosis en hígado y bazo; también se observa necrosis
centrolobulillar en hígado.
Imagen 4. Pigmento nefropático asociado a una hemolisis
severa causada por IN Fuente: Equine Neonatal Medicine Paradis 2006.
El
diagnóstico de un potro que ha consumido calostro y es sospechoso de poseer IN
debido a los signos clínicos como debilidad, decúbito prolongado, anemia,
ictericia y taquicardia es necesario realizar un test de Coombs directo que se
encarga de detectar la presencia de isoaglutininas. Esta prueba se encarga de
detectar los anticuerpos circulantes capaces de adherirse a los eritrocitos
causando la hemolisis, en caso de que el potrillo aun no haya ingerido el
calostro se realiza el test de Coombs indirecto. También existe la posibilidad
de realizar un test de aglutinación rápido, que consiste en tomar 1ml de
eritrocitos del potro lavarlos 3 veces con solución salina y colocarlos en una
suspensión salina nuevamente al 3%, luego se toman partes iguales de la
solución y de calostro y se colocan en un tubo de ensayo en el cual es incubado
por 1 hora a temperatura ambiente tomándose una gota y llevándola al microscopio para
confirmar la presencia o ausencia de aglutinación. De presentarse aglutinación
quiere decir que el animal es reactor a IN, en caso de no presentarse
aglutinación se debe considerar que existe un margen de error considerable
debido que es una prueba indirecta ya que pudiera existir la incidencia de
lisinas que están en proporción mayor que la aglutinina, por lo tanto el método
más confiable para la detección de IN es el test de Coombs.
El
tratamiento está dirigido esencialmente en mantener la homeostasis, como el
primer signo de la IN es la anemia es necesario realizar una transfusión
sanguínea con un donante compatible con el fin de restablecer la cuenta
eritrocitaria, tomándose en cuenta que el donante no pertenezca a los sistemas
A y Q. La utilización de fluidoterapia también permite mantener la volemia y reemplazar el
déficit metabólico estimulando la función renal.
Imagen 5. Transfusión sanguínea a potro. Fuente: Color atlas of diseases
and disorders of the foal.
La prevención de la IN puede llevarse a cabo
tomando una seria de medidas tales como tipiaje sanguíneo de ambos progenitores
evitando el cruce entre animales que posean los sistemas A y Q, el suero de la
madre sin antecedentes de isoinmunización y el pre-calostro deben confrontarse
con los eritrocitos del padre 1 a 2 semanas antes del parto, de presentarse
aglutinación el potro no deberá consumir calostro ya que incondicionalmente
padecerá de IN. Al momento del nacimiento se le debe colocar al potro un bozal
con el fin de impedir su alimentación durante un periodo de 48-72 horas en los
cuales aun están en capacidad de absorber isoanticuerpos a nivel intestinal, la
yegua deberá ser ordeñada cada 2 horas con el fin de eliminar los anticuerpos
calostrales los cuales son eliminados entre las 18-24 horas.
Imagen 6-7. Izq potro con sonda nasogástrica, Der
potro mular con bozal. Fuente: Equine Neonatal Medicine Paradis 2006.
Los
potros privados del consumo de calostro deben ser alimentados de manera
artificial mediante una sonda nasogástrica o un biberón y en lo posible deben
administrárseles calostro antes de las 16 horas de nacido con el objetivo de
lograr una buena inmunidad ya que luego el intestino pierde casi toda la
capacidad de absorción, el calostro debe ser extraído de madres de la temporada
de nacimientos anterior y almacenado en bancos en el haras con el fin de
tenerlo a la mano lo antes posible; de no ser posible el suministro de calostro
se deberá aportar inmunoglobinas vía intravenosa de un donante compatible, con
el objeto de lograr unos títulos aceptables de inmunoglobinas con el fin de
proporcionarle la inmunidad necesaria al potro durante los primeros meses de
vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Al hacer algún comentario en cualquiera de los temas publicados en Jinete y Caballo, recuerda utilizar los buenos modales y evita palabras irrespetuosas u ofensivas.
Gracias por tu comprensión...